¿Por qué el nombre de Biloba?
A finales de la década de los 90 estaba iniciando un proyecto de comunicación en relación con estilo de vida, terapias naturales o complementarias y el cuidado de la salud en términos globales. Teniendo que elegir un nombre para dicho proyecto surgió “Biloba”. Pero, ¿por qué el nombre de “Biloba”? ¿Por qué decidí incluso registrar como marca para dar cobertura a mi trabajo?
Os sonará Ginkgo biloba, a mí siempre me llamó la atención desde las primeras revistas que leía sobre «remedios naturales» en los años 70 y en os estudios en la primera carrera en los años 80, siempre me ha seguido. A mis alumnos de Fitoterapia y Farmacopea China, les hablaba con pasión y devoción del Ginkgo… Biloba como nombre ha seguido toda mi carrera y como marca aúna lo que hago, lo que hacemos en cuidado, comunicación, etc.
Te cuento parte de lo que les enseñaba, y enseño, a mis alumnos….
El Ginkgo biloba es un árbol originario de China que está considerado como un fósil viviente. Su antigüedad se fecha en unos 250 millones de años, antes incluso de que los dinosaurios pasearan por La Tierra. Es un vegetal de estructura no muy evolucionada pero muy fuerte que le ha permitido resistir el paso del tiempo y las tremendas inclemencias a que se ha visto sometida la especie. Si te interesa la información histórica y geológica, en el libro Sinkia y la última hoja biloba, además de una aventura preciosa, tendrás más datos.
Se encontró en los jardines palacios de los gobernantes y emperadores como árbol precioso cuidado y reservado para las familias poderosas. Se trajo a Europa durante el siglo XVIII como árbol ornamental y se conservó en jardines, observándose su capacidad para resistir la contaminación en las ciudades y las inclemencias de los factores atmosféricos adversos. De hecho, hay informaciones que confirman que resistió las bombas de Hiroshima y Nagasaki.
Además de otras maravillosas virtudes, sus semillas tienen la capacidad de tonificar la «Sustancia Basal de Riñón, la Esencia» que tenemos conservada cada uno de nosotros, un concepto propio de la medicina china que refiere a aquello que nos permite desarrollarnos como seres humanos, pero también como seres individuales, únicos. Por eso se dice que el Ginkgo biloba puede “alargar la vida”.
El Ginkgo biloba es una especie dioca, quiere decir que existen ejemplares masculinos y femeninos. Su hoja madura está formada por dos lóbulos perfectamente simétricos, por eso el calificativo del género: biloba. Podría decirse que el Ginkgo es una representación de la fortaleza que existe en la unión y en el equilibrio entre Yin y Yang, opuestos y complementarios.
Cuando llegó a Europa, aquí se empezaron a emplear sus hojas por su capacidad de “mejorar la memoria” y “hacer llegar la musas”, por eso fue muy empleado por artistas, escritores, etc.
Queriendo beneficiarnos de sus virtudes elegí tomar la energía de su nombre.
¿Quieres saber más? Aquí te dejo una preciosa historia que vive Sinkia, se llama Sinkia y la última hoja biloba.
Aquí reproducimos un poema de J. W. Goethe en el que habla del Ginkgo biloba como representación de sí mismo. El poema fue escrito para una amante y el 15 de septiembre de 1815 en el manuscrito original, escrito unos días antes, pegó unas hojas de Ginkgo.
“Hoja de árbol del este,
que a mi jardín se confía,
secreto sentido ofrece,
como al sabio edifica.
¿Es un sólo ser vivo,
que en si mismo se divide?
¿Son dos que se han elegido,
que tal uno se percibe?
Si respondo a esas cuestiones
creo que el buen sentido doy,
¿no sientes en mis canciones
que yo uno y doble soy?”.